A estas alturas, poco más hay que añadir sobre Fernando Belasteguín (Buenos Aires, 1979) que no se haya dicho ya. Conocido como el ‘Boss’, el argentino es seguramente la mayor figura de la historia del pádel, acumulando un palmarés histórico en el que se ha coronado hasta en dieciséis ocasiones número 1 del mundo.

A sus 45 años, el argentino está dando sus últimos pasos en el pádel profesional, con una retirada que llegará una vez terminen el Major de México y el P1 de Milán. Un momento que muchos no queremos que llegue.  

Su presencia en el Premier Padel Finals de Barcelona está más que complicada, pero -como no podía ser de otra forma- Bela tendrá su cabida en el torneo, que le ha preparado un más que merecido homenaje a sus 30 años de carrera deportiva. Así pues, aprovechando su estancia en la presentación oficial de las finales en La Chiquita Padel de Mundo Deportivo hemos aprovechado para charlar un rato con él.

Entrevista a Fernando Belasteguín

Muy buenas Fernando, ¿Cómo estás?

Muy bien, contento.

Ahora vienen los últimos torneos de tu carrera. Todos conocemos lo competitivo que eres, pero imagino que también tratarás de disfrutar el momento al máximo…

Yo disfruto si me siento competitivo. Por eso estoy muy contento que en un año tan difícil que arranqué jugando mal por lesiones, lo termino físicamente mucho mejor de lo que lo había empezado. Entonces estoy muy feliz que pueda terminar siendo competitivo, corriendo como corrí la semana pasada en Kuwait durante tres horas.

Es una suerte que llegue hacia el final de mi carrera, el Tour Finals sea en Barcelona y que me hayan dado la posibilidad de despedirme en cancha con mis excompañeros que fui número uno, Juan Martín Díaz y Pablo Lima, con mis adversarios más directos como Juani Mieres, Seba Nerone y Gaby Reca y que tanto Gianluca Vacchi como Carles Puyol me hayan confirmado que van a estar ese sábado.

Son dos amigos que me ha dado el pádel, pero que les estaré eternamente agradecido porque fueron de los primeros que dieron a dar a conocer el deporte en el mundo. Cuando ‘Puyi’ se retiró, en la conferencia de prensa dijo que iba a jugar al pádel. Son detalles que los guardo con muchísimo cariño.

¿Qué significa para ti que el homenaje sea en Barcelona y que te acompañen algunos de tus amigos y compañeros?

Vivo en Barcelona desde hace 17 años, mi señora es de acá y mis tres hijos también han nacido acá. Cuando vi el calendario y vi que el Tour Finals era en Barcelona, dije: «cuanta suerte he tenido a lo largo de mi carrera». La despedida en Mar del Plata, en Argentina, ni que lo hubiera escrito habría sido como fue. Es increíble que me pueda despedir en Barcelona, delante de toda la gente, en la ciudad donde vivo».

Justo me hablabas de tu buena actuación en Kuwait. ¿Qué sensaciones estás teniendo al lado de Tino Libaak?

Estoy feliz porque es un chico que, más allá que adentro de la cancha no hay que hablar porque lo demuestra cada campeonato, Lo bien que juega fuera me ha hecho volver a la adolescencia. Estoy viviendo los últimos dos meses de mi carrera, tres jugando con él, como un niño de 16 años.

Solamente puedo darle las gracias a Tino que haya aceptado terminar conmigo con lo que significa eso, ya que él me engancha en una etapa de mi carrera profesional que vengo sin ganar torneos, y que me esté haciendo disfrutar como lo estoy haciendo. Le estaré eternamente agradecido que el final de mi carrera haya sido tan dulce a nivel deportivo gracias a lo que me está aportando.

Antes de Tino, también has compartido pista con jóvenes como Tapia, Coello o Yanguas. ¿Cómo te sientes al ver que has contribuido a formar jugadores que ahora están en la cima?

Bueno, el tiempo que pasé con ellos lo único que hacía era ser profesional, como lo he sido en todo mi carrera deportiva. Yo con que se hayan llevado de mí el amor y el respeto hacia nuestra profesión, ya con eso me basta.

Soy un agradecido de haber podido cruzarme en el camino de estos jóvenes, que yo creo que me han aportado más ellos a mí que yo a ellos en el sentido de que, si no hubiera jugado con ellos, habría sido imposible que ganase campeonatos con 40, 41, 42 o 43 años, como lo hice con Arturo en Monterrey a final del 2022. Yo le doy las gracias a ellos que me dieron la posibilidad de jugar.

Su energía debe ser contagiosa…

Contagian un montón de cosas, así que una de esas es la energía y la verdad que me ha hecho muy bien.

Vamos a hablar del Mundial. ¿Cómo viviste la victoria de Argentina desde fuera?

Con nervios, pero lo disfruto como un hincha más. Yo lo puse en mis redes sociales: sentí que fue la mejor final de la historia entre Argentina y España. 7-6 en el tercer punto, con una pareja muy joven como Leo y Tino, que jugaron muy bien contra un jugador tan experimentado como Paquito en enfrentamientos así. Muy contento de que Argentina siga siendo campeona del mundo. Y te puedo asegurar que se sufre más desde fuera que desde dentro.

Para terminar, ¿cuáles son tus planes una vez te retires como jugador de pádel profesional?

Bueno, voy a seguir trabajando en la marca Wilson Bela, que es la franquicia que tenemos, y estoy atrás de buscar para hacer un club acá en Barcelona. Quiero hacer un Bela Padel Center acá en la ciudad para salir con el pádel y con la marca hacia el mundo. Quiero convertir Barcelona a través de los Bela Padel Center en un sitio de referencia a nivel mundial para que venga muchísima gente a conocer esta gran ciudad.

Fuente: Mundo Deportivo